Eurocopa 2008: El comienzo del éxito

Luis Aragonés

Seleccionador

Once titular

Día del debut

El Camino a la Gloria

El camino a la Eurocopa de Suiza y Austria comienza con muchas dudas. El primer enfrentamiento lo resuelve el equipo de Luis Aragonés con goleada ante Liechtenstein, hasta ahí todo normal.  En las dos primeras salidas en donde comienzan los problemas. Primero en Belfast España cae derrotada por Irlanda del Norte (3-2), y en el siguiente partido pierde en Solna con Suecia (2-0). Aragonés comienza un enfrentamiento con la prensa y Raúl, que era uno de los jugadores más importantes y capitán de la Selección, deja de ser convocado. Por suerte el equipo fue capaz de darle la vuelta a la situación y en los diez partidos restantes sumó nueve victorias y un empate para clasificarse como primera de grupo a la Eurocopa 2008. Se la jugó en la última ventana de selecciones en noviembre de 2007 con los dos países con los que había caído derrotado y cumplió con nota. Primero derrotó por 3-0 a Suecia y para certificar la primera plaza a Irlanda del Norte por 1-0.

Los suecos clasificaron en la segunda posición a solo dos puntos de España, mientras que los norirlandeses quedaron eliminados en la tercera posición. El resto de países del grupo F de clasificación a la Eurocopa                         -Dinamarca, Letonia, Islandia y Liechtenstein- quedaron fuera, con mucha distancia de los puesto que daban el billete para Suiza y Austria.

Fernando Torres en un partico contra Liechtenstein durante la clasificación a la Eurocopa 2008 | Foto: Diario As
Villa y Torres celebran uno de los goles del 'hat-trick' del 'Guaje' | Foto: UEFA
Güiza celebra el gol de la victoria contra Grecia | Foto: El Mundo

España quedó emparejada junto a Rusia, Suecia y Grecia, siendo a priori la gran favorita para el primer puesto. Con Grecia ya había coincidido en el anterior europeo, y  con Suecia en esa misma fase de clasificación y ante ambas no había obtenido los mejores resultados. El primer partido fue con Rusia y el resultado no pudo ser mejor. David Villa anotó un ‘hat-trick’, España jugó a un nivel altísimo y cerró el partido 4-1 deslumbrando en su debut. Por parte de los rusos descontó Pavlyuchenko en el 86 y Fàbregas terminó de maquillar el marcador en el descuento.

El segundo partido fue con la Suecia de Ibrahimovic, uno de los mejores delanteros de la época. España contaba con una dupla arriba que sin duda estaba en esa lista y ambos se encargaron de demostrarlo. En el primer tiempo Fernando Torres desvió un centro de David Silva para adelantar a ‘La Roja’. Ibra igualó el resultado con un gol de delantero puro, bajando el balón dentro del área, defendiéndolo con el cuerpo, y disparando raso cerca de Casillas que no puedo detener el balón. En el segundo tiempo España siguió dominando, pero sin acierto a la hora de culminar las jugadas. En el descuento cuando parecía que el partido terminaría empatado, Villa recogió un balón en profundidad de Capdevila y batió con un chut raso al meta sueco para dar la victoria a España. El triunfo además le dio a España la primera posición del grupo a falta de jugar el partido contra Grecia.

Con el pase como primeros a la siguiente fase, Aragonés realizó numerosos cambios en el once inicial para enfrentarse a los vigentes campeones. Únicamente repitió Andrés Iniesta respecto a los dos primeros partidos, y fue el único cambio español en todo el choque. Un choque que España comenzó perdiendo. Como ya hiciera cuatro años antes, Charisteas superó a Casillas. En esta ocasión rematando con un testarazo potente un centro de falta de Karagounis. Pero el ‘equipo B’ español tenía ganas de demostrar que merecía una oportunidad, y en la segunda mitad comenzó a jugar realmente bien. Cesc Fàbregas puso un balón al espacio a Güiza, este dejó con la cabeza a Rubén de la Red que con un voleón marcó el primero de España. Los de Aragonés lo siguieron intentando y Sergio García tuvo las mejores oportunidades, pero no fue capaz de superar a Nikopolidis. De nuevo parecía que el partido se cerraría en tablas, pero apareció el ‘Pichichi’ del fútbol español aquella temporada. Dani Güiza ganó el segundo palo y con la cabeza remató un centro preciso de Sergio García desde la derecha para dar a España el pleno de victorias en la fase de grupos.

No se puede decir que España tuviera demasiada suerte, pues el destino la enfrentó con la vigente campeona del mundo, Italia, que había quedado en la segunda posición del grupo C. Fue un partido extremadamente difícil, pero por fin sería el día que España rompió la famosa maldición de cuartos de final, en la que había sido eliminada hasta en cinco ocasiones desde el Mundial México 1986, donde se estrenó el formato actual de competición.

Luis Aragonés recuperó el once de los dos primeros partidos para medirse con los italianos, que tenían bajas importantes en el centro del campo como Andrea Pirlo y Gennaro Gattusso. El partido siguió el guion esperado, con una España dominante con la posesión de balón e Italia esperando replegada a la contra. La Selección sufrió para encontrar grietas en el muro italiano, así que probó con algunos lanzamientos lejanos que no causaron demasiados problemas a Buffon.

Más de lo mismo en la segunda mitad, con alguna ocasión italiana que desbarató Casillas. En los minutos finales España apretó y Senna estuvo cerca de decantar la victoria para los nuestros, pero Buffon desvió el balón que posteriormente se estrelló en la madera. El marcador no se movió y el partido se marchó a la prórroga. Con los jugadores exhaustos apenas se vio juego, una ocasión en cada portería en dos jugadas aisladas y finalmente llegaba la tanda de penaltis.

Villa tomó la responsabilidad de lanzar el primero y no decepcionó. Fabio Grosso empató con un lanzamiento ajustado al poste izquierdo, pero Casillas ya avisaba lanzándose sobre el mismo lado y estando cerca de llegar al balón. Cazorla prácticamente calcó el disparo de Villa y España se ponía de nuevo por delante. De Rossi trató de repetir el disparo de Grosso pero no le salió tan cerca del poste y Casillas ponía en ventaja a España con una enorme parada. Marcos Senna con una tranquilidad pasmosa definió por el centro para hacer el 3-1. Camoranesi, soportando la presión de forma extraordinaria, chutó un penalti perfecto a la izquierda de Iker, que había vuelto a adivinar la dirección. Era el turno de Güiza, tiró hacia su derecha con el interior, pero no engañó a Buffon que repelió sobradamente el disparo del jugador gaditano. Di Natale tenía la oportunidad de igualar la tanda, pero era el día de Casillas. El mostoleño adivinó la intención del italiano y detuvo con solvencia su disparo para mantener a España un gol arriba. Ahora la presión caía sobre los hombros de Cesc Fàbregas, si marcaba España estaría en las semifinales. Y eso hizo, disparó con el interior al palo derecho engañando por completo al meta italiano y rompiendo la maldición de cuartos que había perseguido a España durante tantos años.

Desde aquella noche, Cesc Fábregas y Casillas entraron para siempre en la historia de la Selección, coronándose como los dos grandes nombres de la clasificación a las semifinales. ‘El Santo’ es actualmente el segundo futbolista que más partidos ha disputado en la historia con la camiseta de ‘La Roja’.

Ramos, Cazorla, Capdevila y Güiza corren después del gol de Cesc | Foto: uefa.com
Xavi celebra con Capdevila el primer gol a Rusia | Foto: RTVE
Definición de Güiza para hacer el segundo tanto | Foto: RTVE

Por las casualidades del fútbol y este tipo de torneos, a España le tocó en semifinales enfrentarse contra uno de sus rivales de la fase de grupos, Rusia. Tanto por el juego desplegado por cada uno como por el resultado de su enfrentamiento semanas antes, España era clarísima favorita. Y así lo demostró sobre el terreno de juego.

La primera mitad comenzó con España buscando el primer gol, pero Akinfeev le negó primero el gol a Torres y después a Villa. Llegando al ecuador del primer tiempo Rusia le cogió el ritmo al partido y llegó la lesión del gran goleador del torneo, David Villa que sería reemplazado por Fàbregas. Con este cambio imprevisto España jugó sus peores minutos, pero se llegó al descanso con el 0-0.

Para la segunda parte los ajustes de Luis Aragonés funcionaron a la perfección desde muy pronto. Corría el minuto 50 cuando una internada por la izquierda de Iniesta acababa en un pase para que su compañero del Barcelona Xavi abriera la lata llegando desde atrás. A partir del gol España se creció y buscó con ahínco el segundo. No fue hasta el minuto 73 cuando Fàbregas con un pase picado dejó completamente solo a Güiza -que llevaba menos de cinco minutos en el verde- para que el sanluqueño con toda la tranquilidad del mundo pasara al portero ruso con una vaselina y prácticamente cerraba el pase de España a la final. El broche final al partido lo haría David Silva culminando una jugada de toque que partía desde medio campo, que aceleró Iniesta con un pase al espacio para Cesc, que cedió finalmente al canario para que definiera a placer.

Partidazo de la Selección que volvía a una final por primera vez desde la Eurocopa de 1984, 24 años antes. La única lástima del partido fue la lesión de David Villa, que sufrió un problema en los isquiotibiales y causó baja en la gran final de Viena. ‘El Guaje’ dejó unas declaraciones después del encuentro que hablan muy bien de la salud de aquel vestuario español: «Al principio estaba fastidiado, pero tras la actuación del equipo uno se anima. Ahora toca disfrutar desde fuera, con más nervios que desde dentro».

En la final esperaba Alemania, que en aquel momento era la máxima dominadora de la historia de la Eurocopa con tres trofeos en sus vitrinas. Había derrotado por el camino a la final a Portugal en cuartos y Turquía en semifinales. En la fase de grupos quedó en segundo lugar, por debajo de Croacia y por encima de la anfitriona Austria y Polonia.

Aragonés recurre a su once de confianza de todo el torneo para la final, a excepción de Villa lesionado. Su lugar como venía siendo habitual sería ocupado por Cesc Fàbregas, que a pesar de no ser titular estaba cuajando un muy buen europeo. El once alemán estaba plagado de estrellas del momento. Klose, Podolski, Lahm, Schweinsteiger y Ballack eran las grandes figuras de aquella selección germana entrenada por Joachim Löw.

Alemania sorprendió a España en los primeros instantes del partido y fue la primera en acercarse a la meta rival. No llegó siquiera a generar una ocasión de peligro cuando ‘La Roja’ consiguió rehacerse y comenzar a incomodar el juego alemán. La primera gran ocasión del encuentro llegó después de una jugada por la izquierda de Iniesta, que puso el balón en el área y tras un rebote en Metzelder cogió dirección a puerta. Lehmann realizó una buena estirada para mandar el balón a saque de esquina, pero ya había llegado el primer aviso. La selección española se hizo con el control del partido y apunto estuvo de ponerse por delante en un cabezazo de Fernando Torres que se estrelló en la cepa del poste. Gran centro de Sergio Ramos que realizó un gran torneo como lateral derecho. ‘El Niño’ estaba desplegando su mejor versión y en el minuto 33 encontró su recompensa. Xavi Hernández recibió el esférico en el centro del campo y levantó la cabeza, vio como el delantero del Liverpool trazaba el desmarque y no dudó en filtrar el balón al espacio. Torres en 2008 tenía una punta de velocidad endiablada, superó a Lahm por su espalda y llegó un segundo antes que el portero alemán al balón. Picó con sutileza para superar la salida de Lehman y el balón se introdujo botando en las redes de la portería del Ernst Happel Stadion de Viena. Un golazo que hacia justicia a lo mostrado sobre el terreno de juego. Por delante en el marcador España se mostró agusto y comenzó a tocar el balón de lado a lado, mientras que los alemanes apostaban por un juego más directo que en ningún momento causó dudas en el área española. Y así llegamos al descanso, 1-0.

Torres pica el balón por encima de Lehmann | Foto: El Confidencial
Torres celebrando el único gol de la final | Foto: El Mundo
Casillas levanta el trofeo de la Eurocopa | Foto: Cadenar Ser
La plantilla homenajea a Aragonés manteándolo | Foto: Getty Images

La segunda parte inició con mayor dominio de los alemanes en el juego como consecuencia del resultado. Mientras España esperaba algo más replegada cazar alguna oportunidad al contragolpe. En un robo alto Alemania encontró a Ballack -que había sido duda hasta última hora- en la frontal del área. El centrocampista impactó un chut potente que pasó cerca del poste derecho de Casillas, golpeando incluso en la parte lateral de la red. Lo cierto es que Casillas se había lanzado bien y parecía tener controlada la situación, pero seguramente fuera la más clara para los jugadores de Löw en todo el encuentro. Aragonés decidió después de esta ocasión por meter un centrocampista de corte más defensivo como Xabi Alonso en lugar de Cesc para dar más empaque al equipo en el medio del campo.

Funcionó bien y España comenzó a tener ocasiones. Primero Sergio Ramos estrelló el balón el larguero con un remate en plancha a un centro de Xavi de falta. Poco después Friedrich tuvo que sacar bajo palos un remate duro de Iniesta a pase de nuevo de un Xavi Hernández que dio un recital. Ambos seleccionadores dieron entrada a sus nueves suplentes en los minutos finales para refrescar los ataques, entrando al campo Dani Güiza por Torres y Mario Gómez en lugar de Klose. El último ‘Pichihci’ español dejó el balón para que Marcos Senna tratara de hacer el segundo al poco de entrar, pero no impactó por muy poco el del Villarreal con el cuero.

Los germanos trataron de meter atrás a España en un arreón final, pero lo cierto es que en ningún momento llegaron a concretar un disparo peligroso que pusiera en peligro la meta defendida por Casillas. Y en un saque de puerta largo del madrileño, mientras el balón volaba por el cielo de Viena, Roberto Rosetti decretó el final del encuentro y España se proclamaba campeona de Europa por segunda vez en su historia, 44 años después.

La Anécdota: Luis Aragonés tenía razón

La andadura de la selección española comenzó con un fuerte enfrentamiento de Luis Aragonés y la prensa. No entendían como podía dejar fuera de la convocatoria a uno de los mejores jugadores de la historia del país y del Real Madrid cómo Raúl González. El tema viene desde lejos, cuando en el Mundial de 2006 comienzan los rifirrafes entre el delantero y el seleccionador. El ‘Sabio de Hortaleza’ consideraba que el ‘7’ ejercía demasiado poder dentro de la Selección. En aquel Mundial de Alemania España perdió ante Francia con Raúl como titular a pesar de estar renqueante físicamente por el reclamo del propio futbolista.

Fue una decisión de la que Luis se arrepintió mucho, pero a pesar de sus diferencias decidió llevarlo a los primeros partidos de clasificación para la Eurocopa de 2008. Aquello salió fatal, con España cayendo goleada ante Irlanda del Norte. A partir de aquella ventana internacional Raúl no volvió a una convocatoria de la Selección. Tampoco lo hizo Michel Salgado, su gran apoyo dentro del vestuario y que le respaldaba en sus actos.

A raíz de este momento Aragonés comienza a otorgar un mayor protagonismo a jóvenes al alza como Cesc Fàbregas o Iniesta, pero sobre todo a David Villa y Fernando Torres.

Aragonés charla con Raúl en una convocatoria de la Selección | Foto: Diario As
Villa y Torres celebran un gol del 'Guaje' ante Rusia | Foto: Eurosport

Aragonés veía en la dupla atacante unas cualidades muy diferentes a las que le podía ofrecer Raúl. La potencia en el desmarque, la velocidad y el gol del ‘Niño’ sumados a la calidad, capacidad de asociación, regate y por supuesto gol del ‘Guaje’ convencieron al seleccionador madrileño para darles la titularidad  indiscutible en la delantera.

Los resultados llegaron desde el principio y España clasificó para la Eurocopa de Austria y Suiza como primera de grupo, dando la situación a un muy mal comienzo.

Terminada la temporada liguera el delantero blanco anotó más goles que Villa y Torres, y muchos esperaban una tregua con el seleccionador para que volviera a la Selección de cara al torneo veraniego. Se abrió un gran debate en torno a la posible convocatoria en todo el país, y la discusión llevó a un enfrentamiento de Luis Aragonés con algunos medios pero la realidad es que Raúl nunca volvería a vestir la camiseta de España, tampoco con Vicente del Bosque.

Villa y Torres realizaron una Eurocopa espectacular, llevando a España a conseguir el título con sus goles 44 años después. Aragonés formó un grupo a su medida, con jugadores que confiaban en su idea y liderazgo. Demostró que tenía razón con resultados.

En Primera Persona: José Félix Díaz

«No todo empezó en el camino a la Eurocopa de 2008 tan bonito como se ha pintado siempre. Había muchos nervios alrededor de la figura de Luis Aragonés, un medio plante de la afición a la Selección y una reunión después de un partido en Oviedo que parecía que incluso podría terminar con Luis fuera del equipo nacional. Finalmente terminó saliendo reforzado de ahí, y poco a poco los jugadores se metieron en dinámica».

«Yo diría que fue como esta pasada Eurocopa de 2024, guardan ciertas similitudes. Va bien el equipo, va creciendo y superando partidos, pero no partían como favoritos al comienzo del campeonato. Contra Suecia en el segundo partido de la fase de grupos se pasaron apuros y fue un encuentro verdaderamente complicado, pero a partir de ahí sigue creciendo. Después llega a los cruces y arrasa».

«Había una comunión total y absoluta. A medida que avanzaba el torneo fue creciendo la confianza. Algunos jugadores que hasta el momento quizás no habían sido tan decisivos en sus equipos lo fueron. Ahí aparece Iniesta, aparece la consagración de Xavi. Aunque parece que no en aquellos momentos no eran dos jugadores tan importantes futbolísticamente hablando».

José Félix Díaz, periodista que cubrió la Euro 2008
Una de las paradas de Casillas en la tanda con Italia | Foto: Getty Images

«Ya luego evidentemente la comunión del vestuario unida la tan especial manera de ser que tenía Luis Aragonés fue algo extraordinario. Esa manera que él tenía de aglutinar a todos, de llevarles en ‘una silla real’ hacia el título sobre todo por la confianza que tenían los jugadores en su persona. Una confianza que nace de una desconfianza, de momentos complicados. Nace de ese partido en Oviedo donde te digo que se temió incluso por su continuidad al frente de la Selección. Desde ahí fueron dando pasos, crearon un ambiente excepcional dentro del grupo y a partir de ahí todo fue rodado. Jugaron muy bien al fútbol».

«El mejor partido en mi recuerdo fue la semifinal contra Rusia, que ganamos 3-0, pero el mejor recuerdo de la Eurocopa sin lugar a dudas es la tanda de penaltis contra los italianos. Aquel penalti decisivo que convierte Cesc Fàbregas y como todo el equipo fue corriendo a abrazar a Casillas, que había sido el héroe de la tanda. Eso fue un punto de inflexión absoluto dentro de la Eurocopa, luego ya fueron los mejores y todos felices y campeones».

Conoce la convocatoria

Estos fueron los 23 futbolistas escogidos por Luis Aragonés para defender la camiseta española en la Euro 2008

1. Iker Casillas (C)

Portero

13. Andrés Palop

Portero

23. Pepe Reina

Portero

2. Raúl Albiol

Defensa

3. Fernando Navarro

Defensa

4. Carlos Marchena

Defensa

5. Carles Puyol

Defensa

11. Joan Capdevila

Defensa

15. Sergio Ramos

Defensa

18. Álvaro Arbeloa

Defensa

20. Juanito

Defensa

6. Andrés Iniesta

Centrocampista

8. Xavi Hernández

Centrocampista

10. Cesc Fàbregas

Centrocampista

12. Santi Cazorla

Centrocampista

14. Xabi Alonso

Centrocampista

19. Marcos Senna

Centrocampista

21. David Silva

Centrocampista

22. Rubén de la Red

Centrocampista

7. David Villa

Delantero

9. Fernando Torres

Centrocampista

16. Sergio García

Delantero

17. Dani Güiza

Delantero